Una zona costera en el noreste de La Coruña ha sido elegida como Geoparque Mundial de la UNESCO. Este paraíso gallego es un enclave de gran biodiversidad que cuenta con espacios naturales protegidos y endemismos animales y vegetales.
Marcando la frontera entre el mar Cantábrico y el Océano Atlántico, se encuentra el Cabo Ortegal. Este territorio se caracteriza por sus elevados acantilados, algunos de más de 600 metros de altura, y por sus inmediaciones están repletas de rías, islotes y calas. Pero, además de eso, el Cabo Ortegal esconde una riqueza geológica sin parangón, que lo ha llevado a ser declarado Geoparque Mundial de la UNESCO.
Cabo Ortegal forma parte de las comarcas de Ferrol y Ortegal, situadas en La Coruña, Galicia. Este accidente geográfico ha dado nombre a un nuevo Geoparque Mundial, título del que goza desde el 24 de mayo de 2023. Con una superficie total de 799,72 km² –de ellos, 168,72 km² de superficie marina– este enclave es ya una reconocida joya geológica. La belleza y singularidad de su paisaje son sin duda merecedores de ese galardón, pero su valor geológico va más allá: es un testimonio de la historia de la Tierra.
El Cabo Ortegal esconde una riqueza geológica sin parangón, con la que se ha ganado ser declarado Geoparque Mundial de la UNESCO
La teoría de la tectónica de placas explica la configuración y los movimientos de las mismas. Estas «piezas de puzzle» se desplazan sobre el manto terrestre, arrastradas por las corrientes de convección. El movimiento de estas placas ha hecho que, a lo largo de la historia de la Tierra, los continentes se hayan unido y separado varias veces. El último supercontinente que hubo en la Tierra se llamó Pangea. Se originó tras la colisión de dos continentes –Laurussia y Gondwana– hace unos 350 millones de años. Fue, precisamente, en esa colisión en la que afloraron las rocas que hoy forman el Geoparque de Cabo Ortegal. Por ello, proporciona algunas de las pruebas más completas de Europa sobre la colisión que creó Pangea.
El título de geoparque mundial de la UNESCO fue lanzado en 2015, y tiene como objetivo reconocer el patrimonio geológico de importancia internacional. Junto con Cabo Ortegal, el Consejo Ejecutivo de la UNESCO aprobó la designación de 18 nuevos geoparques mundiales el año pasado. Actualmente, existen 195 geoparques repartidos en 48 países de todo el mundo. Estas áreas geográficas son únicas por la protección del legado geológico y promueven la educación y el desarrollo sostenible.
Los geoparques pretenden construir un puente entre el medio ambiente y la sociedad
Además, buscan construir un puente entre el medio ambiente y la sociedad. Tanto en Cabo Ortegal como en el resto de geoparques, el patrimonio geológico se funde con el patrimonio cultural, y también con el medioambiental. El geoparque gallego es un enclave con gran biodiversidad, que cuenta con espacios naturales protegidos y endemismos animales y vegetales.
Cabo Ortegal conservará esta designación durante un periodo de cuatro años, tras el cual tendrá que revalidar el correcto funcionamiento y la calidad del geoparque. Mientras tanto, su objetivo será honrar el pasado y guiar el presente y el futuro hacia un uso sostenible de nuestro entorno.